CITARÁN A DECLARAR A BOYÁN Y BLANCO POR AMENAZAS EN EL CASO ALEXANDER

Susana Boyán protagonizó varios casos polémicos en La Paz / ARCHIVO WEB

SEGURIDAD | 10 Dic 2018

VISOR BOLIVIA / Redacción central.- La Fiscalía de Distrito de La Paz retomará en los siguientes días el proceso presentado por la defensa del médico Jhiery Fernández contra los exfiscales Susana Boyán y Edwin Blanco, por las presuntas amenazas que ambos funcionarios realizaron durante el caso del bebé Alexander.

La anterior semana se había anunciado la convocatoria a ambos abogados, que fueron parte del proceso penal contra Fernández y que lograron una sentencia de 20 años, emitida por la entonces juez Patricia Pacajes, aunque sin prueba científica verificada.

La fiscal de Materia, Amparo Morales, informó que a partir de su retorno de un permiso especial, desde esta semana abordará el caso y aseguró que se emitirán las convocatorias a declarar a ambos exfiscales, además de ocho testigos ante el Ministerio Público.

Fernández había denunciado que la comisión de la Fiscalía de Distrito asignada a su caso realizó amenazas, incluso dentro del Tribunal Décimo de Sentencia, cuando la juez Pacajes la presidía, ejerciendo de esa forma presión contra el debido proceso. Esto activó la investigación de oficio por la nueva administración nde la Fiscalía Departamental.

“Se ha iniciado un proceso por las amenazas que los fiscales han hecho dentro de todo el juicio, amenazas contra la forense, contra los testigos, investigadores y los peritos”, explicaba el médico, hoy en libertad, al matutino Página Siete.

Su referencia fue a la forense Ángela Terán quien fue una de la perito que confirmó que no hubo violación al menor de ocho meses aquel 15 de noviembre de 2014.

La forense fue relevada del cargo y cuando se destapó el caso del audio de la juez Pacajes, en el que se reconocen presiones de la comisión de fiscales, Terán ratificó su informe, pero evitó emitir mayores declaraciones por la reserva que tenía el juicio.

Tanto Boyán como Blanco, que fueron brazos del exfiscal general Ramiro Guerrero, habían sido reubicados en puestos administrativos de control biométrico de personal, dentro de la Fiscalía de Distrito de La Paz, pero ambos renunciaron a sus cargos a las pocas horas.

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