LLANOS BUSCA JUSTICIA PARA DAR CON AUTORES INTELECTUALES DE LA MUERTE DE SU PADRE

Julio Llanos fue empujado al piso y golpeó la cabeza, lo que le provocaría luego la muerte / ARCHIVO PÁGINA SIETE

SOCIEDAD | 13 Feb 2020

VISOR BOLIVIA / Redacción central.- El abogado y activista Ramiro Llanos espera que con el cambio del fiscal departamental se pueda hacer justicia por la muerte de su padre Julio Llanos, quien fue agredido por las hordas masistas el pasado 29 de octubre, llegando a fallecer un mes después por complicaciones por el golpe sufrido en el cráneo.

El fiscal departamental William Alave fue destituido y reemplazado por Marco Antonio Cossío como fiscal departamental de La Paz y con ello se inicia otra fase al mando del Ministerio público, siendo el primer funcionario que no responde a las líneas políticas del Movimiento Al Socialismo (MAS).

Llanos confía en esta nueva administración en la Fiscalía para que pueda avanzar el caso por homicidio planteado contra los autores materiales, dirigentes de organizaciones sociales aliadas al MAS, que en octubre protagonizaron una marcha por la supuesta “defensa del voto rural”, en pleno Prado paceño, donde se encuentra las carpas de vigilia de las víctimas de la dictadura, desde 2012.

En su paso, algunos marchistas de los “ayllus” paceños llegaron a confrontar a las personas de esa vigilia, todos adultos mayores, y fue Julio Llanos quien sufrió el ataque de al menos dos sujetos que lo golpearon y empujaron al suelo. El activista cayó y golpeó la cabeza, lo que luego le provocaría complicaciones, la pérdida de conciencia y al final, su lamentado deceso en 28 de noviembre.

Sin embargo, el exdirector de Régimen Penitenciario considera que se debe ir más allá con las investigaciones para dar con los autores intelectuales que llevaron a las organizaciones sociales a salir con violencia y con el objetivo de confrontar a la ciudadanía, con el único fin de defender el proyecto de poder de la cúpula del MAS.

En ese sentido, Llanos recordó que esa jornada se vio en El Prado a la exministra de Salud, Gabriela Montaño, al hermano del entonces vicepresidente, Raúl García Linera, Gustavo Torrico y otras personas que azuzaron a la gente como buscando la confrontación.

Testimonios de lo sucedido ese día, incluyendo a periodista que captaron el momento justo de la agresión y la caída de Julio Llanos, afirman que los marchistas campesinos actuaban con violencia contra todos los transeúntes, mientras un grupo de mineros se reía ante aquel cuadro trágico.

Luego del fraude electoral del 20 de octubre, Evo Morales y su cúpula salió con un discurso triunfalista y fue el propio jefe de Estado el que arengó la “defensa del voto rural”. Las marchas del MAS se tornaban violentas como se registró en La Paz, la carretera Potosí a Oruro y sobre todo en la ciudad de El Alto, cuando se produjo un cerco racista al aeropuerto internacional, apuntando contra los visitantes del oriente, solo por haber advertido la presencia del entonces líder cívico Luis Fernando Camacho.

Todos esos actos tuvieron su cúspide de violencia luego de la renuncia de Morales a la Presidencia el 10 de noviembre, cuando las hordas masistas llegaron a quemar las casas del miembro del Consejo Nacional de Defensa de la Democracia (CONADE) Waldo Albarracín, y la periodista y presentadora de TVU, Casimira Lema.

Todas esas denuncias todavía se encuentran en etapa de investigación en la Fiscalía de La Paz.

//@VisorBolivia//