Caretas de médicos, enfermeras y policías, en primera línea para Todos Santos

SOCIEDAD | 16 Oct 2020

“Hicimos esas caretas porque queremos recordar a quienes perdieron la vida por la pandemia del coronavirus”

PÁGINA SIETE.- Los “rostros” de médicos, enfermeras, policías y militares que lucharon en primera línea en la etapa más crítica de la pandemia del coronavirus son dignos de recordar en la tradicional celebración de Todos Santos, que es el 1 de noviembre. Por eso, la artesana Nancy Aquice elaboró caretas de t’antawawas con esas características.

“Hicimos esas caretas porque queremos recordar a quienes perdieron la vida por la pandemia del coronavirus”, contó Aquice, una artesana que desde hace 40 años ofrece caretas hechas de yeso en la populosa avenida Max Paredes de La Paz.

Según la también comerciante, este año, los artesanos elaboraron estos diseños de caretas en homenaje a los médicos, enfermeras, policías y militares que lucharon en primera línea contra la Covid-19.

El puesto de Aquice, de 56 años, es muy conocido en el sector. “Sus caretas son muy diferentes a las que se ofrecen en otros lugares. Son diseños muy trabajados”, murmuró una mujer a su acompañante, mientras ambos se acercaron al lugar. Y efectivamente, cada una de las caretas tiene un acabado impecable. Por ejemplo, las de los médicos y las enfermeras tienen los ojos brillantes y de cansancio, además lucen gorros quirúrgicos y barbijos.

En el caso de los policías y militares, los gorros que tienen las caretas se diferencian de acuerdo con los grados. “Aunque algunos no llevan grado”, dijo Nancy e indicó que tienen diseños de suboficiales de las mismas instituciones de seguridad, también elaboraron las piezas dedicadas a los conscriptos y Policía Militar.

En el puesto también hay caretas de las otras víctimas de la pandemia: las personas de la tercera edad. “Hicimos de los ancianitos. Son caretitas que están saliendo mucho”, dijo.

Estos diseños tienen arrugas, cabello y cejas blancas. Hay diseños de hombres y mujeres, todos llevan sombreros. La vendedora explicó que pese a que cuenta con una gran cantidad de esas figuras, hay dos variedades. “La calidad varía. La cusqueña tiene más detalle y las viejitas tienen hasta trenzas, pero en las otras no son tan detalladas ni las mujeres llevan trenza”, explicó.

La docena de las caretas de abuelos vale 100 bolivianos, por unidad a 10 bolivianos. En el caso de los profesionales que perdieron la vida en la pandemia, hay modelos de dos tamaños. Los pequeños -que miden cerca de siete centímetros- cuestan 40 bolivianos (la docena). Las de 10 centímetros valen 60 bolivianos (la docena).

En el puesto de la artesana también se pueden encontrar caretas de “uñeritas” (del tamaño de la uña) para las galletas y las tradicionales t’antawawas. Están también los “Sayiri” caretas extragrandes (20 centímetros) que llevan para armar la mesa en el primer y segundo año de la partida del alma. Los hay para hombres y mujeres.

Para los niños, los artesanos elaboraron caretas de Thanos y de las princesas Ana y Elsa, de la película Frozen. Se ofrecen también diseños de los personajes de Los Vengadores y de Chespirito, entre otros.

Cultura Según la tradición, cada 1 de noviembre las familias que perdieron a un ser querido arman un altar con panes, frutas y comida. En esa mesa no pueden faltar las t’antawawas, los caballos y las cruces, todas las figuras son elaboradas de masa de pan.

Costumbre “Es importante que la mesa tenga figuras de pan de un caballo y una llama. Según la tradición, estos animales ayudan a cargar sus panes”, explicó la artesana.
Oferta Hay personas que compran las caretas de t’antawawas de Todos Santos y las llevan a España, Brasil, Italia y Estados Unidos.

//FUENTE: PÁGINA SIETE//