El golpe no fue golpe, fue conspiración de Evo Morales y sus ministros

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ESPECIALES | 7 Jul 2021

CABILDEO / Zulema Alanes.- El ex comandante de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB), Gonzalo Terceros, desarmó el relato del “golpe de estado” y puso en evidencia un plan conspirativo que dirigió el propio Evo Morales en su intento de prorrogarse en el poder.

Lo dicho por el exjefe militar va siendo corroborado por exautoridades del régimen del MAS que reaparecieron para tratar de explicar lo que planeaban en los días previos a la renuncia y posterior fuga de Evo Morales, el 11 de noviembre de 2019, acorralado por las evidencias del fraude electoral.

Terceros, enviado con detención preventiva a la cárcel de Palmasola por el denominado caso “golpe de estado”, detalló en 19 páginas las últimas horas de Morales en la presidencia y las acciones que los días previos a su renuncia tomó junto al entonces vicepresidente Álvaro García Linera y los exministros Javier Zabaleta, Carlos Romero y Juan Ramón Quintana.

Morales estaba dispuesto a conformar comandos civiles para enfrentar a la ciudadanía movilizada contra el fraude electoral en 2019 mientras ordenaba a las Fuerzas Armadas mantenerse en sus cuarteles y quemar la ciudad de La Paz para concretar su plan de fuga del país luego de haber intentado evitar su alejamiento del poder que mantuvo durante 14 años, dijo el excomandante de la FAB.

El domingo, Terceros y el excomandante de la Armada Boliviana, Gonzalo Jajuri, que decidió acogerse al derecho a guardar silencio, fueron enviados a prisión, en tanto el comandante general de las Fuerzas Armadas, Williams Kaliman, a quien secundaron el día que éste leyó el comunicado sugiriendo la renuncia de Morales a la presidencia, goza de la protección masista.

Cuatro de los cinco miembros del Alto Mando Militar que el 10 de noviembre estuvieron presentes en la conferencia de prensa donde el excomandante general “sugirió” la renuncia de Morales están detenidos. Kalimán, es el único que no es habido y se rumorea que se encuentra a buen recaudo en territorio venezolano.

LAS REVELACIONES DEL EXCOMANDANTE

WIllimas Kaliman, comandante de las Fuerzas Armadas en 2019, sabía que Evo Morales renunciaría a la presidencia del Estado tres horas antes de hacer público un comunicado oficial que “sugería” su dimisión, aseguró el excomandante de la FAB, Gonzalo Terceros, en su declaración informativa ante la comisión de la Fiscalía que lo investiga bajo los cargos de “terrorismo, sedición y conspiración”.

El Alto Mando Militar no deliberó respecto a los conflictos derivados del fraude electoral de 2019, y se limitó a analizar los acontecimientos “cuando el entonces presidente Evo Morales Ayma convocó al comandante en jefe, Williams Kaliman, y él nos pidió que lo acompañemos en dos oportunidades”, declaró el exjefe militar y detalló que esos encuentros fueron el 9 y 10 de noviembre en la residencia presidencial en San Jorge.

Dijo que en la primera reunión, el 9 de noviembre, cuando alertaron respecto al peligro de avance de ciudadanos del interior del país para masificar las protestas contra el fraude, Evo Morales preguntó a su ministro de Gobierno, Carlos Romero: “¿Cómo es de los dos mil compañeros que estamos trayendo para enfrentar a los que están bloqueando en las calles?...”, que le informó que llegarían esa noche a la sede de gobierno. A continuación, Morales pidió a los jefes castrenses que habiliten predios militares para alojar a las bases masistas movilizadas a la sede de gobierno, demanda que no fue atendida porque los recintos militares no podían albergar esa cantidad de personas.

Según relató el general Terceros, advertido de la creciente convulsión social y del riesgo de una “guerra civil”, Morales instruyó a los militares que “Como no tienen munición, no pueden sostener un conflicto, deben mantenerse en sus cuarteles” y cuestionó a García Linera por su intención de avanzar hacia la zona sur “con dos mil compañeros que trajimos” y dijo que no dio la orden para ese operativo "porque eran muy pocos, si hayan sido diez mil yo te autorizaba”.

El 10 de noviembre los jefes militares se reunieron por segunda vez con Morales que esperaba el informe de auditoría de la OEA para tomar decisiones. El encuentro fue a las 8.00 de la mañana. Se replegaron al Estado Mayor de Miraflores a la espera del ministro de Defensa, Javier Zabaleta, y a las 15:30 aproximadamente el general Kaliman anunció: “Señores, Evo Morales ha decidido renunciar, está yendo al Chapare a renunciar por lo que creo conveniente, para hacer quedar bien a las Fuerzas Armadas, elaborar una nota de prensa...". Minutos más tarde, a las 15:48, se leyó el comunicado militar “sugiriendo” a Morales que renuncie.

Zabaleta se hizo presente en la oficina del Comandante en Jefe y “se puso a llorar” mientras se esperaba “el discurso desde Chimoré, ahí Kaliman le dio todas las garantías para que lo cuiden hasta que él esté a salvo; posterior a ello salió el comunicado respecto a la renuncia de Adriana Salvatierra y le recomendaba Zabaleta a Kaliman que no saque las FF.AA. a las calles”., detalló Terceros.

Evo Morales renunció a las 16:50. Un día después fugó del país en un avión que el presidente de México, Juan Manuel López Obrador, le envió al Chapare. Previamente, amenazó con mandar a quemar la ciudad de La Paz.

Terceros dijo que fue presionado para garantizar el ingreso y salida del avión bajo bandera mexicana, luego de que el propio Evo Morales le amenazó: “Si no me autoriza el ingreso de ese avión usted será culpable de que los 15.000 compañeros que estaban bajando de El Alto a La Paz quemen la ciudad”.

LA CONSPIRACIÓN: EVO, ÁLVARO Y SUS EXMINISTROS

Las declaraciones del excomandante de la FAB, Gonzalo Terceros, tienen asidero en dichos de los exministros Javier Zabaleta y Juan Ramón Quintana, y coinciden con las revelaciones que hiciera Evo Morales en su discurso del 11 de noviembre de 2020 en Chimoré, a su retorno a Bolivia desde Argentina, con Álvaro García Linera de testigo.

“Álvaro se comunica con el general Terceros, ningún problema general, aquí están más de 10 mil compañeros concentrados, va a arder el aeropuerto, vamos a arder nosotros, van a arder sus soldados bajo su responsabilidad, esa llamada telefónica ha sido clave. Le dijo páseme con el piloto y otra vez carreteamos para levantar vuelo, no podíamos salir por Perú o Ecuador, estaba prohibido”, recordó Morales en la concentración de Chimoré cuando retornó de su autoexilio tal como también lo detalló el exjefe militar, en su declaración ante el fiscal el pasado 3 de julio.

Los planes revelados por Terceros, según aseguró, estaban orientados a generar caos y enfrentamientos como estrategia para controlar las protestas ciudadanas durante las jornadas de octubre y noviembre de 2019, tal cual lo revelaron entonces los exministros del régimen de Morales.

El 6 de noviembre de 2019, el entonces titular de la cartera de Defensa advirtió que Bolivia está a "un paso de contar muertos por docenas”. Lo hizo en medio de los enfrentamientos protagonizados entre manifestantes que exigían la convocatoria a nuevas elecciones y los grupos de choque que el MAS parapetó en plaza Murillo para evitar que las protestas avancen hacia Palacio de Gobierno.

“Estamos a un paso de que esto se descontrole totalmente y comencemos a contar los muertos por docenas. Ahora lo que debería interesarnos a todos nosotros, es que mañana (hoy) esto no termine en una sangría”, advirtió Zavaleta en declaraciones a los medios de comunicación.

Cinco días antes, Juan Ramón Quintana, ministro de la Presidencia, advirtió que Bolivia estaba camino a convertirse en un Vietnam moderno”, en una entrevista con el medio ruso Sputnik.

“Bolivia se va a convertir en un gran campo de batalla, un Vietnam moderno porque aquí las organizaciones sociales han encontrado un horizonte para reafirmar su autonomía, soberanía, identidad”, dijo Quintana al medio ruso. 

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