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TITANES DEL PACÍFICO: LA INSURRECCIÓN ¿O LA PERDICIÓN DE LO QUE PUDO SER UNA GRAN SECUELA?

ARTE&SHOW | 4 Abr 2018

VISOR BOLIVIA / Hernan Jemio.- De la mano del director Steven S. DeKnight quien dirigió la serie de televisión “Spartacus” llega la segunda parte de Titanes del Pacífico: Insurrección, una secuela que no va acorde a la primera entrega.

DeKnight parece no entender el trabajo que Guillermo del Toro hizo en la primera parte basándose en animes como “Mazinger Z”, “Ataque a los Titanes” y principalmente “Evangelion” mostrando un escenario casi apocalíptico al estar la humanidad bajo constantes ataques de criaturas llamadas Kaiju. Esta secuela no trata de innovar en la historia después de que, como se vio en la anterior película, la tierra es salvada gracias a los esfuerzos de las maquinas creadas por el hombre denominadas Jaeger.

Continuando con esta línea temporal, la historia avanza lenta provocando aburrimiento en el público a un punto que parece solo hecha para generar dinero dejando de lado la intención de querer contar una buena historia. En ocasiones pretende ser una adaptación del tipo infantil a diferencia de su predecesora que complacía tanto a niños como a adultos.

El reparto, que hizo un buen trabajo, conformado por John Boyega (Star Wars: The Last Jedi), Jing Tian (The Great Wall), Charlie Day (Horrible Bosses), Burn Gorman (Game Of Thrones) deja muy atrás a actores que parecen estar metidos en el papel de rocas como fue el caso de Adria Arjona (True Detective) la hija del músico Ricardo Arjona, y especialmente Scott Eastwood (Gran Torino) quien a pesar de ser el hijo del gran actor y director Clint Eastwood continúa bajo la sombra de éste pues el papel en el que tuvo mejor desenvolvimiento parece ser “Fast and Furious 8”.

La banda sonora es reciclada a excepción de una canción, pero aun así se ve opacada por el uso incoherente de acción junto con los efectos especiales de CGI que se perciben a simple vista, a decir verdad son pocas las secuencias de pelea que sí tienen coherencia y que fueron desarrolladas con energía de trabajo.

Probablemente se recomendaría al espectador que vaya a ver esta película con un hijo o primo menor de 7 años para poder coincidir en algún gusto, pero si decide ir solo se puede asegurar que terminará arrepintiéndose en caso de que le gustara la primera parte. Es por eso que se le da medio boleto del miércoles par, si pensaba ir a verla mejor espere a que esté disponible en Internet o a que salga en formato DVD.

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