SUMAN CAMBIOS EN BTV EN MEDIO DE LÍOS, PROCESOS Y DENUNCIAS DE ACOSO SEXUAL

Gerentes sospechosos por acoso y abuso, presunta corrupción por compra de equipos y una larga lista de implicados que pasaron por “el canal de todos los bolivianos”

López durante la interpelación en el Senado respondió al caso Prontis / MIN. COMUNICACIÓN

SOCIEDAD | 15 Feb 2018

VISOR BOLIVIA / Redacción Central.- Este jueves, la ministra de Comunicación, Gisela López, posesionó a una nueva gerente general en el canal estatal Bolivia TV. Con ello, la funcionaria trata de cerrar un capítulo oscuro en la televisora oficialista que se plagó de denuncias de corrupción y acoso sexual que le significarán una nueva interpelación en la Cámara de Senadores.

López, la cuarta titular de esa cartera después de Iván Canelas, Amanda Dávila y Marianela Paco, posesionó a Paola Pérez como gerente general en reemplazo del gerente interino Ramiro Coaquira que, a su vez, estaba en el cargo tras la salida de Fabiola Rollano por renuncia irrevocable.

“Yo he sido parte de esta familia de Bolivia TV, ha sido mi escuela, ustedes conocen mi trabajo, juntos hemos aprendido y ahora juntos nos toca emprender este nuevo desafío y transformación”, dijo Pérez citada por la agencia estatal.

Pérez trabajó en el canal estatal, así como Yadira Peláez y Claudia Pardo, ambas funcionarias de la regional de Beni y Santa Cruz hasta 2015, y que denunciaron ser víctimas de acosos sexual por parte de los antecesores de la nueva gerente general de BTV.

En mayo de 2016 se destapó el escándalo por denuncia de Peláez contra Carlos Flores, quien la llamaba constantemente y luego insinuó favores sexuales. La denunciante expuso su caso ante López, entonces gerente general de BTV, pero ella buscó una salida consensuada. El acusado negó los cargos y luego presentó informes contrarios sobre el desempeño de la víctima.

Peláez luego fue despedida y amenazada por otros altos funcionarios del canal en La Paz. En el caso de Pardo, ella no solo sufrió acoso sexual sino que fue amedrentada en sus labores.

El escándalo provocó la reacción del movimiento feminista mujeres Creando que ingresó a estudios de BTV pidiendo la destitución de Flores. La salida del sospechoso solo fue para asumir otro cargo, en la Procuraduría General, pero la prisión mediática hizo que deje el nuevo puesto a los pocos días.

Una tercera víctima, que pidió reserva de su identidad, se sumó a las denuncias agregando haber sido contagiada de una infección de transmisión sexual por parte del también gerente del conocido Canal 7, Daniel Lanza.

El sujeto fue aprehendido ayer y mantiene esa calidad procesal en celdas de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (FELCV) mientras se convoque a su audiencia cautelar en las siguientes horas. Lanza no emitió declaraciones a los medios de cobertura.

En todo el embrollo, la ministra López se presentó el miércoles a la interpelación de la bancada opositora para responder por el caso de presunta corrupción del Programa Nacional de Telecomunicaciones e Integración Social (Prontis), destinado a equipar al canal estatal con alta tecnología valuada en Bs 25 millones.

Del caso se encuentra con detención domiciliaria el exgerente Gustavo Portocarrero, sospechoso de avalar la compra de equipos de baja calidad a una empresa que obtuvo contratos desde la gestión de Amanda Dávila.

López se refirió al caso en el Senado y aseguró que fue ella quien reveló esos hechos.

“Esto salió a la luz pública no porque la oposición lo haya denunciado, sino porque yo lo denuncié, la corrupción en Bolivia TV la corté yo en un año y dos meses, y me costó", declaró.

Colectivos feministas se sumaron a la denuncia contra los exgerentes de BTV / ARCHIVO WEB

La bancada minoritaria escuchó sus respuestas sin mayor asombro, pero anticipó que convocarán a la funcionaria en otra oportunidad para hablar de las denuncias de acoso sexual y acoso laboral.

La senadora de Unidad Demócrata (UD), Jeanine Añez, durante la interpelación, anunció ese proceso legislativo para conocer los motivos por los que las comunicadoras víctimas de acoso sexual, fueron despedidas o suspendidas de sus cargos por orden de la ministra de Comunicación.

Añez abogó para que sus colegas parlamentarias se sumen a esta investigación más allá de los colores partidarios, pues se trata de la vida y dignidad de un par de mujeres bolivianas que buscan justicia.

López, concluida la interpelación, salió del hemiciclo y dijo sentirse acosada por los opositores y aquellos medios de comunicación a los que afectó con sus denuncias de corrupción desde que fue gerente del canal estatal.

La ministra ve que esos “grupos de poder” solo “instrumentalizan” a Peláez y Pardo para dañar su imagen. La funcionaria, además, tiene abierto un proceso contra Peláez por “acoso político” por lo que la comunicadora del oriente ya fue citada un par de veces ante el Ministerio Público.

Con todo, el escándalo de BTV parece no tener freno y en el corto plazo, mediante el avance de las investigaciones podría concluir con procesos contra todos los altos ejecutivos, gerentes y exministros del área de propaganda gubernamental.

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