Visor Bolivia Diario Multimedia
Viernes, 26 de Abril de 2024

Cuando vi el tuit del presidente Evo Morales la madrugada del pasado lunes 19 de marzo, me agarré la cabeza con las dos manos y me dije: ¡Por Dios, esto traerá consecuencias! Luego, constaté que el jefe masista es una máquina tuiteando: En 11 minutos (entre las 04.37 y 04.45) despachó seis trinos. El más desacertado, el último de la tanda antes de la apertura de los alegatos en La Haya.

Escribe: Víctor Hugo Cárdenas

“Los deslices de Bolivia en La Haya”

Muy pocas veces, un proceso judicial despertó tanto interés como la demanda de Bolivia contra Chile ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya. La emergencia y la difusión de la figura de los “compromisos unilaterales” en el derecho internacional facilitó el camino a nuestro Gobierno para la construcción y aplicación de la demanda. Los argumentos bolivianos fueron consistentes y, en cambio, la diplomacia chilena no logró conformar una línea de argumentación coherente.

Escribe: Hugo Marcelo Balderrama

“La paternidad bajo ataque"

Terminaban los años 80, la Unión Soviética se resquebrajaba y con una acertada visión del futuro, el fallecido tirano Fidel Castro, empezó la búsqueda de nuevos países donde exportar su revolución y obtener auspicios. 

Escribe: Mónica Olmos Campos

“Decepcionar por ser como eres”

Cada vez que peco de ser yo misma, me acuerdo de la lectura enviada por mi amigo Eduardo Morales desde Portugal. El texto es de Adam Grant y se titula “Sé tú mismo, es un pésimo consejo”. 

Evo Morales ha actuado en estos 12 Años como el cruzado de la coca ilegal contra los productores legales. En su afán de ganar indulgencias y afianzar su guardia pretoriana asentada en el trópico cochabambino, contra viento y marea, cual templario del medioevo, ha impulsado la anulación de la Ley 1008 y la aprobación de la Ley 906 que legaliza la coca ilegal que se produce en su tierra santa.

Doce años después, existe una evidencia en el país: no hay democracia plena ni siquiera imperfecta. Entonces, ¿bajo qué régimen vivimos los bolivianos? ¿Dictadura, autoritarismo o totalitarismo? Esta pregunta causó polémica en el Colegio Abierto de Filosofía, que auspició un conversatorio sobre El periodismo en épocas totalitarias, el miércoles 14 del presente.

El vicepresidente coqueteó con la clase media. Enarboló su corbata casi como este escribidor solía ceñirse el galante traje de moreno-caporal en coyunturas carnavaleras. Pero, claro, solo en un arrebato de insensatez se me hubiese ocurrido ir a mi oficina o a dar mi cátedra con ese atuendo. Él lo hizo. En su compulsividad matemática, calculó fríamente que aquel disfraz lo exhibiría potable al veredicto sinuoso de esa clase media. Guardó al guerrillero y convocó al profesor de universidad privada o al consultor de la comunidad europea, ataviándose al efecto esa curiosa vestimenta, jamás usada en los tiempos de voladuras ni en los años de turismo estudiantil por México.

Escribe: Hugo Marcelo Balderrama

“Decisiones suicidas”

Corría el año 1947 y el profesor Friedrich Hayek convocó a 36 intelectuales de las ciencias sociales y económicas, a una reunión en el hotel du Parc en la villa de Mont Pelerin (Suiza). De esa reunión surgió la Sociedad Mont Pelerin, organización cuya principal meta era la defensa de la sociedad occidental y las instituciones que la sostienen: el gobierno limitado, la propiedad privada y el libre mercado.

“La gente”, observó Octavio Paz en uno de sus últimos textos, referido precisamente a la situación europea, “vive más años, pero sus vidas son más vacías, sus pasiones más débiles y sus vicios más fuertes. La marca del conformismo es la sonrisa impersonal que sella todos los rostros”. [...]. “La democracia está fundada en la pluralidad de opiniones. Nada menos democrático y nada más infiel al proyecto original del liberalismo que la ovejuna igualdad de gustos, aficiones, antipatías, ideas y prejuicios de las masas contemporáneas”.

Un confuso incidente registrado al interior de un micro de servicio público en Santa Cruz de la Sierra, protagonizado por dos mujeres, una de batón y otra de pollera, se convirtió en pocas horas en una cuestión de Estado. Las máximas autoridades del Gobierno central, entre otras, el vicepresidente García y el ministro de Gobierno, no escatimaron esfuerzos ni tiempo para dedicarle al incidente sendas conferencias de prensa y declaraciones, en las que condenaron toda forma de racismo y discriminación. La condena señaló a la mujer de batón como victimaria y a la mujer de pollera, como víctima de racismo.

Escribe: Víctor Hugo Cárdenas

“Nueve años de un crimen impune”

La semana pasada hemos recordado nueve años del criminal ataque a nuestra vivienda rural. Intentaron quemar vivos a mi esposa, a mis hijos y a mis familiares. En la plaza de mi comunidad, una reunión conducida por el exalcalde de Achacachi Eugenio Rojas (hoy ministro de Estado) coordinó el asalto.

Recuerdo las cucharas de mango negro de mi abuela, destinadas al exclusivo uso alimentario de la empleada doméstica y me viene a la mente, raudamente, su grito desaforado al aventurarme, en alguna ocasión, a tomar la sopa aferrado a este vistoso utensilio: “nooooo, esa cuchara no es para vos…”. El alegato apuntaba a no contaminarme con semejante herramienta que se autodelataba como “no apta para la familia”.

Escribe: Hugo Marcelo Balderrama

“El feminismo vs. la feminidad”

Sí, ya sé: no soy mujer, pero este artículo trata de la defensa de la mujer como individuo, y de la defensa de la libertad. Ni hablaré yo, presentare el trabajo de tres valientes mujeres que se atreven a nadar contra la corriente: Yorbis Esparragoza, Alicia Rubio y Teresa Marinovic.

Escribe: Marcelo Ostria - Trigo

“¿Termina la era Castro en Cuba?”

Así lo plantea el periodista Daniel Lozano su artículo publicado en La Nación de Buenos Aires el 10 de marzo. Se trata de una buena relación de cómo se va terminando la era castrista -la de la familia del caudillo de Sierra Maestra- y la apertura de la incógnita sobre la continuidad o no de su política, luego de la sucesión presidencial.

Lastimosamente, dentro del quehacer político con mucha ligereza muchas autoridades, prevalidas de su poder circunstancial, se permiten ofender, insultar o agraviar, muy especialmente a sus adversarios políticos.

A casi 30 años de haber sido inaugurada como Centro de Rehabilitación Santa Cruz, la cárcel de Palmasola está muy lejos de alcanzar los objetivos propuestos por los gestores del proyecto que prometía resolver el grave problema que presentaba el único penal que funcionaba entonces en el segundo anillo y final de la calle Libertad de la capital cruceña. Nunca lo logró, por los mismos motivos que marcan hoy el fracaso del penal más poblado del país: ausencia de una política de Estado que encare al sistema penal como parte de un cuerpo mayor en el que el bienestar social y la justicia son piezas fundamentales.

La respuesta (8/3/18) del expresidente colombiano Andrés Pastrana (1998-2002) a nuestro presidente boliviano es muy dura: “Plan Colombia salvó a Colombia de las garras del narcotráfico, ese que usted produce, alienta y protege hace décadas, ese que alimenta cárteles como el de mi secuestrador Pablo Escobar y a sus amigos de las FARC. 2016 Bolivia dijo No a su reelección, Colombia dijo No a las FARC”.

Escribe: Andrés Gómez Vela

“El futuro comenzó lejos de aquí”

La Universidad Salesiana de Bolivia me invitó el jueves a compartir ideas con estudiantes y docentes sobre el tema Cambios generacionales en los jóvenes (siglo XXI). Complejo jugar el papel de yatiri, sin haber estudiado “yatirología” o haber sido tocado por un rayo. Sin embargo, se puede usar la razón para proyectar probabilidades a partir de lo que pasa ahora en el mundo.

Escribe: Diego Ayo Saucedo

“Mar, democracia y Evo Morales”

¿Por qué la historia es tan cruenta, oh mi señor? El apoyo unánime de la OEA en 1979 reconociendo el asunto del mar como un problema de índole hemisférica perdió su relevancia a los pocos días de haber tenido lugar, gracias al golpe de estado a la cabeza de don Natusch Busch. No terminaba el país entero de aplaudir el espaldarazo de la OEA, que esta camada de bolivianos se aventuró a truncar nuestro sueño y devolvernos a aquella realidad pringada de viveza criolla, ambición desmedida y estultez crónica. El desenlace despertó conmiseración en el exterior. ¿Cómo este país podía exigir consideraciones de tipo legal si en su propio patio rebosaba la ilegalidad?

Thomas Edison, el inventor del fonógrafo y la lámpara incandescente, se enamoró del cinematógrafo, y en 1879 les compró a los Lumiere sus derechos de explotación para la Costa Este. A finales del siglo XIX, Edison cobraba derechos de explotación a pequeñas empresas productoras, que pronto empezaron a considerar abusivos los derechos que Edison pretendía.

Mostrando 1280 de 1460 registros