DESINSTITUCIONALIZACIÓN PLENA: TRES CABEZAS SE ATRIBUYEN MANDO DEL COMITÉ CÍVICO PACEÑO

Dos facciones acatarán el paro nacional del 6 de diciembre, el grupo pro-gubernamental no, por ver “intereses políticos”

Clemente Gutiérrez es el aliado al MAS que actúa con su grupo en cada evento gubernamental de plaza Murillo / CAMBIO

SOCIEDAD | 2 Dic 2018

VISOR BOLIVIA / Redacción central.- La carencia de institucionalidad ha llegado a carear todas las entidades civiles del país con dirigencias paralelas como lo sucedido en el Comité Cívico de La Paz que hoy tiene tres cabezas, una progubernamental y dos llamadas independientes, que pugnan la dirigencia con serias denuncias penales.

Para el 6 de diciembre se ha convocado a un paro cívico a nivel nacional en rechazo a la postulación del binomio oficialista Evo Morales y Alvaro Garcia, pues toque ambos están inhabilitados por mandato del referendo vinculante del 21 de febrero de 2016 y la Constitución Política del Estado en su artículo 168.

Siete de los comités cívicos departamentales del país han confirmado que acatarán este paro de 24 horas, excepto Beni y La Paz.

En el caso del comité paceño, Clemente Gutiérrez fue quien calificó el paro como “político” y al no ser consensuado carece de legitimidad.

Gutiérrez es parte del comité pro La Paz que obedece al régimen de Evo Morales. Este dirigente y sus seguidores forman parte de los grupos de apoyo al mandatario que llenan plaza Murillo e incluso hacen seguimiento a cualquier manifestante que ingresa al centro político del país para pedir su desalojo a través de la Policía.

Otra cabeza que se atribuye la dirigencia cívica es Flavio Chacón, quien aseguró hoy, entrevistado por radio Panamericana, que el comité paceño sí participará de las movilizaciones y acatará el paro del jueves.

Flavio Chacón encabeza otro de los grupos cívicos afincado en El Alto / CAPTURA PAT

Chacó dijo que se recibirá a los marchistas que llegarán desde el altiplano, también el sector del TIPNIS y que se coordina acciones con los cocaleros de Yugas, todo para hacer una vigilia pacífica en la sede del Tribunal Supremo Electoral en la plaza Abaroa de La Paz.

Sin embargo, el dirigente cuestionó la representatividad del presidente cívico de Cochabamba, uno de los principales organizadores de la marcha del 21F, porque además se atribuye la jefatura de los comités a nivel nacional.

A ambos “presidentes cívicos”, se suma Antonio Alarcón, otra de las cabezas de la desinstitucionalizada entidad paceña, que además formuló, mediante la misma emisora, acusaciones penales contra Chacón y Gutiérrez.

Sobre Chacón dijo que este salió hace tres meses del penal de San Pedro, luego de haber estado involucrado en un hecho de homicidio vehicular. Sobre Gutiérrez, recordó que el sujeto caracterizado por usar un sombrero de ala ancha fue acusado por particulares por tratar de extorsionar un caso en la Fiscalía con 20 mil dólares.

Antonio Alarcón dice tener pruebas de delitos cometidos por sus pares cívicos / EL DIARIO

Alarcón asegura que su facción tiene representación legal y que fue electo por dos años trabajando en oficinas del hotel Torino, pues la sede cívica está tomada por el grupo progubernamental.

“Que muestren las actas de las reuniones en las que dicen que han participado, seguro las van a falsificar, porque eso saben hacer. Ellos viven de eso”, denunció.

El caso del Comité Cívico Paceño es solo otro dentro de los paralelismos y representaciones paralelas, divididas por intereses políticos, que han germinado con el régimen del proceso de cambio.

La Federación de Juntas Vecinales - FEJUVE, tanto en La Paz como en El Alto también tienen dos cabezas, unas afines al régimen de Evo Morales y otras aliadas a los gobiernos municipales de Luis Revilla y Soledad Chapetón, respectivamente.

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